La Obra Social de Cajasol acogió ayer la celebración de un encuentro organizado por la Universidad Pablo de Olavide (UPO) y el Instituto Andaluz de la Mujer en el que se analizaron las condiciones del trabajo que llevan a cabo las mujeres en el sector informal de la economía. Según un estudio realizado por la UPO, sólo la mitad de las mujeres que colabora en la empresa familiar recibe compensación económica. Más información

La Obra Socialde Cajasol ha acogido la celebración de la “Jornada de Economía Informa, tiempos y género”, organizada por la Universidad Pablo Olavide y el Instituto Andaluz de la Mujer. En el encuentro se han debatido las condiciones de trabajo que llevan a cabo en el sector informal de la economía, poniendo de manifiesto la desigualdad de género que la situación conlleva. [Ver cursos de Igualdad de Género]

La directora del Máster en Género e Igualdad de la UPO, Lina Gálvez Muñoz, ha destacado la importancia que las empresas familiares tienen en el tejido productivo, que en España producen el 70% del PIB y generan el 75% del empleo privado. Gálvez ha recordado que muchas mujeres realizan un trabajo no remunerado en estas empresas en régimen de colaboración, lo que supone una discriminación de género, ya que esta actividad no está vinculada a ningún tipo de prestaciones como las pensiones contributivas.

La UPOha realizado un estudio del trabajo en régimen de colaboración de las féminas en las empresas andaluzas, para el cual se han realizado 601 entrevistas a mujeres en Andalucía. Un 31% colabora en la empresa familiar habitualmente y un 22% de manera ocasional. El 85% dice trabajar para servir al bienestar familiar, pero sólo la mitad recibe compensación económica, y en la mayoría de los casos en cuantías inferiores a los 500 euros mensuales.

Según Lina Gálvez, esta situación supone una discriminación a la mujer. Cuando se les interroga acerca de los motivos por los que no reciben remuneración, un 42% responde que se debe a problemas de liquidez de la empresa. La poca valoración social y familiar hace que las propias mujeres no pongan en valor su trabajo. [Ver cursos de Autoestima]

Por su parte, la directoral del Instituto Andaluz de la Mujer, Soledad Pérez Rodríguez, ha señalado que la mujer representa el principal perfil de las personas afectadas por la economía informal, que supone entre el 15% y el 27% del PIB en España.

Según Soledad Pérez, “muchas mujeres consideradas inactivas han buscado una ocupación compatible con su trabajo doméstico al margen de los circuitos oficiales de trabajo, cuidando niños o ancianos, en la limpieza, en el trabajo a domicilio por cuenta propia o ajena, o en tareas de ayuda familiar. Con todo ello se refuerza aún más la idea de que el salario de la mujer es auxiliar, un complemento al salario del marido”.

Según datos de la EPA, más de medio millón de trabajadoras del hogar se encuentran en la economía informal en España, ya que 895.000 hogares emplean a una persona para estos fines, pero son sólo 295.000 las que están dadas de alta.

La directora del IAM insiste en que “la sociedad aún se encuentra alejada de la equidad y, en la actualidad, la desigualdad y discriminación están presentes a lo largo de todo el recorrido de la vida laboral de las mujeres”. Para Soledad Pérez, “la conciliación y la corresponsabilidad no es sólo una cuestión de justicia, sino también un elemento clave para sacar a la mujer de la economía informal y fomentar así el desarrollo empresarial y económico de la sociedad”. [Ver cursos de Desarrollo Empresarial]